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lunes, 7 de marzo de 2011

La ciencia, el presunto culpable y el testimonio de los testigos.

Recién vi la película documental “Presunto Culpable”. Es una película bien interesante que me dejó pensando muchas cosas. Bueno, y para variar, pues como soy científico inmediatamente me puse a pensar si la ciencia podría contribuir en algo para ayudar a mejorar el Sistema Judicial Mexicano que es puesto en clara evidencia en este documental.




De acuerdo al documental parece ser que una de las evidencias con mayor peso es la declaración del testigo del asesinato, quién dice reconocer al presunto culpable como parte de la banda que participó en el asesinato de su primo. El uso de ese testimonio no es nuevo ni exclusivo de México, ya que en otros sistemas judiciales como el de Estados Unidos y Canadá el uso de la identificación por testigos presenciales (o eyewitness, como les llaman en inglés) también tiene un peso importante en los juicios. En estos paises se han desarrollado diferentes investigaciones las cuales fueron revisadas por Gary L.Wells y Elizabeth A. Olson, y publicadas bajo el título de “Eyewitness Testimony” en el Annual Review of Psychology, en el 2003.

¿Como funciona eso de los testigos?

Desconozco como funciona a fondo el sistema por el cual el testigo reconoce al sospechoso en el sistema Mexicano. Sin embargo, por lo que se puede intuir del documental, los agentes judiciales le presentan al testigo al presunto culpable para que lo reconozca o lo desconozca en su caso. Si el testigo lo reconoce, pues ya estuvo. Esto quiere decir que un aspecto fundamental del proceso se basa en la memoria de reconocimiento del testigo.

En el sistema de Estados Unidos parece ser que al testigo se le presenta un “lineup” de sujetos. Esto es, se le pone al testigo una fila de sujetos entre los cuales se encuentra el sospechoso para ver si lo identifica como el culpable del crimen. Una característica de esta fila es que los sujetos que se encuentran en ella, no son sospechosos, claro a excepción del sujeto que se cree participó en el crimen. De esta forma, si se identifica a uno de los sujetos que están de relleno, se sabe de antemano que no es culpable. Una fila simultanea es en la que todos los miembros de la fila son presentados simultáneamente. Sin embargo, también se puede poner una fila en la que las personas desfilan una tras otra ante el testigo. Otra característica de estas filas es el número de participantes que pudieran ser realmente reconocidos. A esto se le llama el “tamaño funcional” de la fila. Por ejemplo, si el testigo dice que el culpable era un hombre de pelo negro, y todos los de la fila son mujeres rubias excepto el culpable, pues entonces el “tamaño funcional” de la fila sería de 1, aunque hubiera otras nueve personas en ella. La definición operativa de “tamaño funcional” es el número de sujetos de la fila que cumplen con la descripción del testigo acerca del culpable.



Para estudiar este asunto del tamaño funcional en las filas, se hacen ensayos con testigos simulados. En este tipo de estudios se usan sujetos que no presenciaron el crimen, pero a los que se les pide seleccionen de la fila a una persona basados en la descripción verbal que dio el testigo sobre el culpable. Si el testigo simulado reconoce a varias personas de la fila, entonces es una buena fila, ya que se escogieron participantes inocentes que pudieran compartir características con el sospechoso. De esa manera el testigo real tendría que esforzarse para identificar al sospechoso y no solamente basarse en características generales.

Entre las variables que afectan la precisión de la identificación por parte del testigo se encuentran las instrucciones que se le dan al testigo antes de ver la fila, así como el tamaño funcional de la fila. Otras variables incluyen también las condiciones en las que se presenta la fila, como las condiciones de luz, o bien si el sospechoso es de la misma raza que el testigo; esto porque se sabe que somos mejores identificando rostros de nuestra misma raza. Por ejemplo, de un primer vistazo nos sería muy difícil reconocer a individuos con rasgos asiáticos si pocas veces los hemos frecuentado. Este efecto es conocido como “other-race effect” o “el efecto de la raza distinta” en la investigación de reconocimiento de rostros.



¿Y la ciencia forense apá?

Claro que en México el problema va mas allá de la metodología que se usa, ya que aunque pudiéramos desarrollar un sistema muy bueno para ayudar a la correcta identificación de un sujeto que participó en un crimen, pues si el juez no valora la evidencia, de nada sirve tanta ciencia forense. Esto parecería que es el caso en el documental, ya que al parecer el Juez no consideró importante el dato en el documental de que la prueba de Harrison y Gilroy había sugerido que el presunto culpable no había disparado un arma, o de que no se encontró el arma asesina, o de que incluso el testigo ni siquiera pudiera dar una descripción del detenido al que acusaba como haber disparado el arma.



Solo para terminar, cabe recalcar que durante el “juicio” exhibido en el documental también participan los agentes judiciales, la representante del ministerio público, el juez, el testigo y el sospechoso. Me sorprendió ver como el careo es una persona frente a la otra preguntándose y respondiéndose acusaciones. ¿Que no habrá una forma donde se pudiera evaluar si alguno de ellos está mintiendo?, pero bueno, eso lo dejaré para otro post...

2 comentarios:

  1. Memoria y sentido común. Aplicar correctamente la justicia, hacer bien tu trabajo, juez, policía, secretario, barrendero, científico.

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